
La Escuela de Formación Profesional de Enoturismo de Cataluña nos confió el diseño de su identidad visual con el reto de transmitir arraigo, evolución y pasión por el mundo del vino y el cava.
A través de esta propuesta quisimos representar el papel clave de la formación en el crecimiento del sector enoturístico. El imagotipo se inspira en los caminos de los viñedos: algunos definidos, otros abiertos, como las trayectorias de quienes se forman en este ámbito. La forma global evoca la silueta de una cepa, símbolo de tradición y territorio.
La paleta cromática, vinculada al vino, al cava y a la tierra, conecta la marca con su entorno natural y cultural, reforzando la identidad de una escuela que forma conectando el origen con el porvenir.


